The antidote for anxiety is agency.
It’s not new to hear that 2024’s youth are worried about the environment – in fact, this rightful concern has stretched centuries, and has been escalating since the 60s. But, what is unique is hearing their individual thoughts about it today.
In response to climate change and further eco challenges in their communities, Tijuana students verbalize their eco-anxieties and their desire to be a part of solutions across the Mexico-US Border.
How do we define “Eco-anxiety?”
We have an idea what anxiety is – but what does that mean to the environment?
According to the American Psychological Association, eco-anxiety happens when we constantly experience or witness “new events” on the news – such as natural disasters, climate change-induced disasters, crimes of ecocide, and more. A one-time event is a shock to the system. But witnessing those shocks over and over again? The psychological effect piles up. The body remains in a state of distress, to the point of it becoming an undertone in daily life: anxiety. According to a 2022 NIH National Library of Medicine study, 84% of surveyed “children and young people” expressed “at least moderate worry” about climate change.
For many, eco-anxiety is not just about what is happening, but the mental loops of “what can we do about it?”
What are students responding to – what does climate change look like in the border region?
Climate change has a similar expression throughout the world, but its impression on the community varies greatly. In her interview with our key partner, Tijuana Estuary, upcycling product designer and teacher Adela Bonilla shares how heavy rainfall carry factory and erroneously dumped plastic waste into the region’s waterways – making its way from the streets to the Pacific Ocean.
Students see it and feel it – and share an agreement in concern across ages.
What does Eco-Anxiety feel like for students in Tijuana?
On April 20th, 2024, students took matters in their own hands – literally. 36 dedicated students at Advancing Students Forward participated in a beach cleanup at the Playas de Tijuana – a beach right on the Mexico-US border between Tijuana and San Diego (see our next blog post for more on the event). In response to the day-long event, students shared their feelings toward the environment in a survey.
“Do you feel anxious about the environment?”
“We don’t know exactly how much time we have left, everyday there is less time available for change.” – A High School Student.
“I’m curious as to why it is dirty.” – A Middle School Student.
Students need clarity in available information – both in environmental statistics and systems that pollute their communities. Plastic waste covers many streets on their commute to school – and not knowing how or why it’s there is distressing.
“I can’t do anything to change mindset and behavior.” – A High School Student.
With “mainstream” discussion repetitively discussing a “point of no return,” learned helplessness is not just a susceptibility – it’s a given. While some may interpret this response as learned helplessness, students display a deeper-rooted emotional maturity – a rumination of indoctrinated beliefs and values.
“A little because if we keep our arms crossed, only watching, in a moment, we won’t be able to do a thing.” – A University Student.
Students don’t want to engage in the “bystander effect” for the environment. They are concerned about behavioral patterns.
“I don’t want to leave the earth in bad conditions” – A High School Student.
The sensitivity speaks volumes.
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Want to Support Students?
ASF’s solution to eco-anxiety is eco-education – an effort toward agency in students’ relationship with the environment. See our next blog post, “Eco-Education” to learn about our curriculum.
If you would like to support our efforts to better students’ social and environmental standing – or wish to sponsor a brilliant student so that circumstances don’t hold back their potential – you may by following the link.
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Ecoansiedad: ¿Qué tienen que decir los estudiantes tijuanenses en 2024 sobre el Medio Ambiente?
El antídoto contra la ansiedad es la agencia.
No es algo nuevo escuchar que los jóvenes en 2024 están preocupados por el medio ambiente; de hecho, ésta preocupación legítima se ha extendido durante siglos, y ha ido aumentando desde los años 60s. Pero lo que es único escuchar son sus pensamientos individuales con respecto a todo esto al día de hoy.
En respuesta al cambio climático y otros desafíos ecológicos en sus comunidades, los estudiantes tijuanenses verbalizan sus ansiedades ecológicas y su deseo de ser parte de las soluciones a lo largo de la frontera entre México y Estados Unidos.
¿Cómo definimos la “ecoansiedad”?
Tenemos una idea de qué es la ansiedad, pero ¿qué significa eso para el medio ambiente?
De acuerdo con la Asociación Americana de Psicología, la ansiedad ecológica ocurre cuando constantemente experimentamos o presenciamos “nuevos eventos” en las noticias, como desastres naturales, desastres inducidos por el cambio climático, crímenes de ecocidio, y más. Un evento único es un shock para el sistema. ¿Pero presenciar esas conmociones una y otra vez? El efecto psicológico se acumula. El cuerpo permanece en un estado de angustia, hasta el punto de convertirse en un trasfondo de la vida diaria: la ansiedad. De acuerdo a un Estudio de la Biblioteca Nacional de Medicina de los NIH de 2022, el 84% de los “niños y jóvenes” encuestados expresaron “al menos una preocupación moderada” por el cambio climático.
Para muchos, la ecoansiedad no se trata sólo de lo que está sucediendo, sino de los bucles mentales de “¿qué podemos hacer al respecto ante ésta situación?”
¿A qué están respondiendo los estudiantes? ¿Cómo se ve el cambio climático en la región fronteriza?
El cambio climático tiene una expresión similar en todo el mundo, pero su impresión en la comunidad varía mucho. En una entrevista con nuestra socia clave, Estuaria de Tijuana, diseñadora y docente de productos de reciclaje Adela Bonilla comparte cómo las fuertes lluvias arrastran los desechos plásticos de las fábricas y los vierten por error en los cursos de agua de la región, desde las calles hasta el Océano Pacífico.
Los estudiantes lo ven y lo sienten, y comparten un acuerdo de preocupación entre edades.
¿Cómo se siente la Eco-Ansiedad en los estudiantes de Tijuana?
El 20 de abril de 2024, los estudiantes tomaron el asunto en sus propias manos, literalmente. 36 estudiantes dedicados de Advancing Students Forward participaron en una limpieza de playa en Playas de Tijuana –una playa que se encuentra justo en la frontera entre México y Estados Unidos entre Tijuana y San Diego (consulte nuestra próxima publicación de blog para obtener más información sobre el evento). En respuesta al evento de un día, los estudiantes compartieron sus sentimientos hacia el medio ambiente en una encuesta que se les realizó.
“¿Te sientes ansioso por el medio ambiente?”
“No sabemos exactamente cuánto tiempo nos queda, cada vez hay menos tiempo disponible para el cambio”. – Un estudiante de secundaria.
“Tengo curiosidad por saber por qué está sucio”. – Un estudiante de secundaria.
Los estudiantes necesitan claridad en la información disponible, tanto en estadísticas ambientales como en sistemas que contaminan sus comunidades. Los desechos plásticos cubren muchas calles en su camino a la escuela, y el no saber cómo o por qué está ahí es angustioso.
“No puedo hacer nada para cambiar la mentalidad y el comportamiento”. – Un estudiante de secundaria.
Mientras que en la discusión “convencional” se habla repetidamente de un “punto sin retorno”, la impotencia aprendida no es sólo una susceptibilidad: es un hecho. Si bien algunos pueden interpretar esta respuesta como una impotencia aprendida, los estudiantes muestran una madurez emocional más arraigada: una reflexión sobre creencias y valores adoctrinados.
“Un poco porque si nos quedamos con los brazos cruzados, sólo mirando, en un momento, no podremos hacer nada”. – Un estudiante universitario.
Los estudiantes no quieren involucrarse en el “efecto espectador” del medio ambiente. Les preocupan los patrones de comportamiento.
“No quiero dejar la tierra en malas condiciones”– Un estudiante de secundaria.
La sensibilidad lo dice todo.
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¿Quiere apoyar a los estudiantes?
La solución de ASF a la ansiedad ecológica es la educación ecológica: un esfuerzo por lograr la agencia en la relación de los estudiantes con el medio ambiente. Consulte nuestra próxima publicación de blog, “Ecoeducación” para conocer nuestro plan de estudios.
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